Esta es la historia de Balduino IV de Jerusalén, llamado el Leproso o el Santo (Jerusalén, 1.161 — 1.185), hijo del rey Amalarico que murió a los treinta y tres años de edad, un adalid de la cristiandad, un joven que luchó contra la adversidad dedicándose en cuerpo y alma a su reino.
A la muerte de su padre, el niño Balduino fue coronado rey, Guillermo de Tiro tutor del joven monarca se percató de la grave enfermedad del infante.
Balduino IV rex Ierusalem amaba la justicia y la paz, estuvo a la altura de los grandes profetas de Israel, luchó contra Saladino con honor y valor, fue muy querido por sus súbditos y admirado por sus enemigos. Su estoica y dolorosa vida ha sufrido un injusto olvido.
En este libro se recogen sus hazañas y dificultades del más pequeño y más grande rey de la cristiandad.