Estos dioses pidieron encontrarse con los otros con el fin de buscar una compensación por el supuesto daño que le habían causado a Gullveig, ahora llamada Heid. La propuesta que los Vanir lanzaron a los Aesir fue el pago de una compensación económica o el reconocimiento de los Vanir como iguales a los Aesir, pudiendo ser venerados como ellos, recibir sacrificios, tributos y tener un reconocimiento entre los seres humanos.