En 1907, conjuntamente la Sociedad Bíblica Americana y la Sociedad Bíblica Británica y Extranjera decidieron emprender otra revisión, que encargaron a un Comité integrado por Victoriano D. Baez, Carlos W. Dress, Enrique C. Thomson, Juan Howland y Francisco Diez, el cual comenzó a reunirse en 1909 y publicó su versión revisada en 1923, la que se conoce como Reina-Valera 1909, por el año en que comenzó el trabajo del Comité. Algunos fieles, por cuestiones teológicas y de fidelidad textual, usan preferiblemente las revisiones de 1862 y de 1909, mientras que rechazan las últimas revisiones.