La mujer no tiene nombre

Ha empezado algo que no es nada agradable y que va a cambiarlo todo, pero ¿el

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Hace mucho calor, no hay nadie en

queridas arrugas, finas, pequeñas, elegantes... Mis amigas. ¿Qué hubiera hecho yo sin vosotras? Sois mi determinación, mi fuerza. Todo lo que viví hasta que cobrasteis vida... todo lo que pasé... cómo luché... y para poder miraros con esta comprensión, con esta felicidad... lo mucho que me esforcé.

que siempre seré quien soy hoy, con todo lo que he luchado y lo que lucharé de ahora en adelante, y que siempre nos amaremos como nos amamos ahora. Nos amaremos como nos amamos ahora.

—Ay, señor, siempre, de cada uno de ellos, dices que esta vez es maravilloso. Al final, ya vemos lo que pasa, siempre encuentras que a esos hombres les falta algo.

Quiero amor, sexo y amistad, los tres juntos, también pasión, emoción, con solo uno no es posible. Si solo hay una de estas cosas, lo que te falta se vuelve algo importante, comienzas a buscarlo... Bueno, ¿y si encuentras amor en uno, sexo en otro y amistad en otro? No, los tres deben estar en el mismo lugar, los tres. ¿Por qué somos tan adictos al amor? ¿Por qué?

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No he desperdiciado ningún momento de mi vida. Siempre he sacado algún provecho de ellos, de todos aprendí algo. Ahora puedo ver los errores que he cometido en su conjunto. Pero todos fueron errores míos, no hicieron daño a nadie. Incluso si herí a alguien, nunca lo hice con ese objetivo. Haréis daño, os harán daño. El sacrificio constante no conduce a la felicidad, ni del que la busca ni del que la encuentra.

No me da miedo, no se preocupe, el miedo no tiene límites, estoy acostumbrada», l

Ninguno dice «Quiero a mi mujer, pero también quiero estar contigo».

Los hombres casados parecen todos sacados del mismo molde. «El matrimonio es algo monótono, en realidad es algo necesario, pero no funciona, uno siente que le falta algo, de hecho, mi mujer y yo ya no tenemos mucha relación. Incluso estamos en habitaciones separadas... Pero los niños... la familia... la sociedad... estamos obligados a seguir con esto, no hay nada que hacer, pero soy tan infeliz, si tú supieras, soy tan infeliz, no sabes lo que necesito a una mujer comprensiva e independiente como tú, me da pena mi mujer, no tiene donde ir...»