El otro día, mientras reflexionaba, me pregunté cuál era la principal diferencia entre el ser humano y el resto de animales. Como seres humanos dominamos el lenguaje, la inteligencia, la capacidad de raciocinio y el orden social, pero son características que el resto de animales también poseen en mayor o menor medida. Incluso puede que los animales también tengan fe. Aunque el hombre se vanaglorie de ser el rey de la creación, no parece albergar ninguna diferencia sustancial con los demás animales, ¿verdad? A mí solo se me ocurre una, madre. ¿Sabes de qué se trata? Es el único rasgo distintivo del ser humano: la capacidad de tener secretos. ¿Lo comprendes?
Mamá se ruborizó ligeramente y esbozó una hermosa sonrisa.