justus: Bravo, bravo, señor bachiller. Gyllen no lo sabía y el temible Sundelius le suspendió. Primera pregunta, respuesta errónea, fuera. Ahora tenemos miedo, miedo de verdad, he tomado demasiado café, de ese brebaje que llaman café. ¿Tienes unas hojas de té que prestarme? Me arde el estómago como el infierno