—No soy capaz de imaginar para un suicidio tan terrible ninguna razón importante, como sería, por ejemplo, una enfermedad incurable o la muerte de la persona más querida. ¡En semejante caso nadie elegiría este final horroroso, que lleva a la muerte a otras personas! Sólo una razón nada razonable puede conducir a un horror tan irracional. En todos los idiomas que tienen su origen en el latín, la palabra razón (ratio, raison, reason) significa en primer lugar la capacidad de razonar. De modo que la razón se entiende siempre como algo racional. Una razón cuya racionalidad no sea evidente parece incapaz de causar un efecto. Pero en alemán razón, en tanto que causa, se dice Grund, que es una palabra que nada tiene en común con el latín ratio y significa originalmente terreno y luego base. Desde el punto de vista del latín ratio, el comportamiento de la chica sentada en la carretera aparece como absurdo, desproporcionado, sin razón, y sin embargo tiene su razón, es decir su base, su Grund. En lo más profundo de cada uno de nosotros está inscrita una razón semejante, un Grund, que es la causa permanente de nuestros actos, que es el terreno sobre el que se levanta nuestro desuno.