el alma en cualesquiera de sus movimientos y actos está toda a la vez. Toda ve, y toda recuerda lo visto; toda oye, y toda recuerda los sonidos; toda huele, y toda recuerda los olores; toda gusta, y distingue por la lengua y el paladar los sabores; toda toca las cosas duras y suaves; toda aprueba o reprueba a la vez. Pero lo caliente y lo frío lo distingue toda con cualquier sentido en general. Toda es vista; toda es oídos; toda recuerda; cuando recuerda toda, toda es memoria; cuando toda quiere, toda es voluntad; cuando toda piensa, toda es pensamiento; cuando toda ama, toda es amor”. Así la música.