“Una vez se ha levantado por la mañana y ha realizado su necesidades, debe lavarse los dientes, aplicar una cantidad limitada de ungüentos y perfumes a su cuerpo, adornar su persona, ponerse ungüento en los párpados y debajo de los ojos, colorearse los labios y mirarse en el espejo. Después de comer su ración de betel, ha de mascar hojas de hierbabuena para mantener el aliento fresco. Debe bañarse diariamente, ungir su cuerpo con aceite perfumado cada dos días, darse jabón cada tres días, lavarse la cabeza cada cuatro días y el resto del cuerpo cada cinco o diez días según lo necesite. Todo esto no debería dejar de hacerse con regularidad y también eliminar varias veces al día el sudor de las axilas”