Seguimos adelante de todos modos. Tenemos el coraje de asumir riesgos y de defender nuestra verdad porque confiamos en poder afrontar la situación si el riesgo asumido nos lleva a la decepción o a la desaprobación. Nos hacemos tan amigos de nosotros mismos que podemos arriesgarnos a ser criticados, a parecer fracasados o a sufrir pérdidas. La gente valiente crea, la gente valiente habla claro, la gente valiente llama falso a lo que es falso, la gente valiente pone su corazón por delante y se la juega, la gente valiente ama exageradamente.