¿Segundas partes nunca fueron buenas?
Para Alex Harcourt fue todo un déjà vu volver a Yosemite. Cal Hollis seguía siendo el mismo ránger atractivo que había besado catorce meses antes y ahora estaba más irresistible que nunca. Pero Alex no podía dejarse llevar otra vez… sobre todo tras averiguar su trágico secreto.
Aquel beso nunca debería haber ocurrido. Pero Cal ya estaba medio enamorado de Alex y las segundas oportunidades no se presentaban todos los días. Cal estaba decidido a superar el pasado y, con un poco de suerte, conseguir a Alex.