Pedro Andreu logra aunar en “Partida entre canallas” la autenticidad vital con la poética, la fuerza de la emoción con la capacidad para comunicarla, la deshinibición semántica con el temple constructivo, y un libro escrito desde actitudes, ideas y referentes aparentemente tan alejados de la lírica ha resultado ser -como suele ocurrir cuando hay verdadero talento- una obra no sólo profundamente poética sino, incluso, temblorosamente virginal. (…) Nos hallamos ante una poesía nueva: descarada, asimétrica, erosiva y veraz, titubeante, rabiosa, embriagada y embriagadora; tierna, canalla, pura y venenosa; arrabalera y brillante.JOSE LUIS MORALES