Segunda entrega de la serie El límite.
Como abogada Kara Crawford sabe cómo guardar secretos, especialmente después de que un ex la despreciara después de que ella le confesará sus más ocultos deseos sexuales. Kara ya ha renunciado a encontrar a alguien capaz de satisfacerla en lo más íntimo (su gusto por el bondage y los azotes) hasta que pasa una de las noches más maravillosas de su vida con alguien a quien siempre había admirado de lejos.
El dominador sexual Dante de Matteo conoció a Kara en el instituto pero nunca se imaginó que sus fantasías sexuales coincidieran plenamente con las de ella. Los dos amantes no esperan que lo suyo sea más que un affaire de una noche, pero cuando Dante empieza a trabajar en el bufete de Kara, tienen que lidiar a diario con las chispas que genera la química sexual entre los dos.
Mientras que un profundo deseo los acerca, el miedo puede acabar por separarlos para siempre, a no ser que aprendan a manejar el dolor y el placer que produce el amor.