La respuesta es una propuesta sobre lo que de verdad puede dar a nuestra vida orientación, autenticidad y sentido. Sólo cuando nos alineamos con nuestra verdadera naturaleza podemos florecer como personas y alcanzar nuestra plenitud. Ya no podemos seguir siendo personas que sólo hacen y que apenas piensan. Si queremos avanzar, hemos de pensar, no sea que acabemos llegando donde nunca hubiéramos querido estar. Pensar con rigor es pensar con alcance, con anchura y con profundidad, y este tipo de pensar tiene mucha relación con el arte de preguntar.