Mientras dormías… Con su hermano Thomas herido en el frente de batalla y habiendo perdido a sus padres, Cecilia Harcourt tiene dos opciones no demasiado halagüeñas: mudarse junto a una tía soltera o casarse con un primo de mente retorcida. En lugar de eso, elige la tercera opción, y cruza el Atlántico dispuesta a cuidar de su hermano hasta su recuperación. Pero, tras una semana de búsqueda, no encuentra a Thomas, sino a su mejor amigo, el apuesto oficial Edward Rockesby. Está inconsciente y necesita urgentemente de sus cuidados, y Cecilia promete salvar la vida del soldado, aunque quedarse a su lado implique decir una pequeña mentira… Le dije a todo el mundo que era tu mujer. Cuando Edward vuelve en sí, está bastante confundido. La contusión en su cabeza le ha hecho perder la memoria de los tres últimos meses, pero sin duda recordaría haberse casado. Sabe quién es Cecilia Harcourt –aunque no recuerde su cara— pero, cuando todo el mundo se dirige a ella como su esposa, concluye que debe de ser cierto, aunque él siempre había pensado que se casaría con su vecina en Inglaterra. Ojalá fuera cierto… Cecilia arriesga su futuro entregándose por completo al hombre al que ama. Pero cuando la verdad sale a la luz, Edward quizás también guarde algunas sorpresas para la nueva señora Rockesby.