Si desde el inicio me atraparon lo capítulos cortos y concisos, a partir de la mitad, cuando aparece la magia, todo toma un giro más interesante, que me hizo no poder dejar de leer.
El protagonista es simpático desde el principio y verlo cómo va madurando en su pubertad es muy divertido. No estoy segura de quién es mi personaje favorito: está Lana, una puberta que debe encontrarse y aprender a demostrar sus sentimientos; Mul, la sorpresa de la historia; Natalia, joven decidida en parte responsable de cómo se desarrollan los acontecimientos; Mamá Medusa, la matriarca con corazón enamorado.
Debo decir que los personajes femeninos son todos memorables: son fuertes, son capaces, no se minimizan ante la adversidad, toman decisiones y actúan para sobrevivir.