Este ensayo examina la filosofía cartesiana como expresión de un sistema económico, la manufactura heterogénea. Es una inquisición sobre las relaciones del pensamiento de Descartes –y de Bacon, Leonardo, Harvey, Galileo, Leibniz y Spinoza— con un modo determinado de producción. Es el análisis, desde las tesis fundamentales de Marx, de un filósofo determinado, lo que nos ofrece la posibilidad de establecer un método semejante en el caso de otros pensadores: la relación de Kant, por ejemplo, con la manufactura orgánica y la biología, o el vínculo de Hegel con la economía política, la gran industria y la ciencia química. Por esto, después de su primera edición en 1969, este texto de filosofía sigue tan vigente y necesario.