El capitalismo ha sido el gran ganador de la historia, ha logrado recrearse y vuelto a surgir de sus cenizas en muchas oportunidades. Ha demostrado que, a pesar de sus enormes contradicciones, resulta ser el mejor intérprete del ser humano, porque refleja como en un espejo, todas sus aspiraciones, transformándose en un motor imparable en la construcción de futuro.
Cenizas capitales intenta desnudar sus contrastes a través de dos historias. Una de ellas, ambientada en la guerra civil española y la segunda guerra mundial. Una narración cruda que refleja las condiciones del exilio y los intentos de supervivencia de un político republicano, en la España de los años 30. La otra, revela las vicisitudes de un joven en la crítica Argentina de los 90, en un contexto de desempleo creciente e inestabilidad institucional.
Un relato descarnado en la que los pecados originarios emergen como respuesta ante las ambiciones desmedidas de los inescrupulosos que allí se enfrentan. Dos épocas diferentes con un punto en común y donde el amor, como camino liberador, intenta escribir cierto, en renglones torcidos.