Es verano; en un idílico hotel de una zona costera indeterminada, dos parejas jóvenes entablan amistad de una manera casual. Según transcurren los días surge una complicidad creciente avivada por conversaciones, cenas, alcohol y algo de marihuana. Pero bajo la superficie del encuentro late una motivación oscura y calculada, un juego sádico y minucioso en el que los verdugos se obligan a respetar unas reglas estrictas que acaso concedan a las víctimas una oportunidad de escape.
Habitación 221 es una novela arrolladora por su dinamismo y frescura, con una estructura innovadora y repleta de audaces diálogos, que agarra al lector desde el arranque y no lo suelta hasta la revelación de su tan inesperado como inevitable desenlace.