En 1959 la Universidad del Valle publicó una edición de «El Alférez Real» de Eustaquio Palacios, comentada por Alberto Carvajal, uno de los intelectuales más prestigiosos de su tiempo. El libro, publicado originalmente en 1886, tiene el mérito de reconstruir la vida de las grandes haciendas vallecaucanas, que fueron determinantes en la formación de la economía regional en el Siglo XVIII, y las costumbres patriarcales que se desarrollaron a su alrededor.
Eustaquio Palacios escoge el escenario de Cañasgordas, la Casa Grande, como la llamaban entonces, para la historia de amor con un inusual final feliz, un tanto impropio de las novelas románticas, entre Daniel e Inés de Lara y Portocarrero. Con el transcurso del tiempo se ha convertido en unos de los hitos de la literatura nacional, y junto con «María» de Jorge Isaacs, en la novela más destacada de la segunda mitad del Siglo XIX, cuando se mezclan el romanticismo y el costumbrismo.
La lectura de «El Alférez Real» permite mirar a Santiago de Cali en tiempos de la Colonia, entender sus condiciones económicas y políticas, sus creencias y costumbres y, en general, la cultura que compartían los vecinos de la ciudad, que se extendía desde la colina de San Antonio hasta la capilla de San Nicolás y desde las orillas del río hasta la plazoleta de Santa Rosa