El viejo Bukowski y su poesía tan real, a pesar de estar esta tan sumergida en un contexto que algunos creen que es de fantasía. Escribir sobre cada momento y ser capaz de que represente algo para alguien... es de admirar. El viejo, el buen, el gran Bukowski. Léanlo... y cómprense una botella de vodka o unas cervezas.
Bukowski, nunca decepciona, su lenguaje mordaz y soez describe situaciones de personas del bajo mundo que todos quieren ignorar.
Es un excelente libro y aquellos que lo crusifiquen de un maldito machista, no ha dicho ninguna mentira, la vida jamás ha sido perfecta y menos para alguien que vivió en lo más bajo de la sociedad.