Una de las mejores prosas y traducciones que he leído últimamente, construida a partir de una anécdota (en apariencia) sencilla, pero de gran profundidad. Un bombardeo de imágenes y figuras complejas que, a pesar de la retórica, nunca dejan de sorprender.
Qué hermoso relato.
Al principio parecía un relato más de una ballena encallada y los relatos que surgen a partir de ello, pero rápidamente se vuelca en una reflexión sobre lo qué significa ser humano y habitar el mundo. Un texto breve que no por eso logra construir una maravillosa estética de desasosiego.