interés por estudiar cómo reducir la intensidad de la red por defecto se disparó. Un año más tarde, el profesor Judson Brewer de la Universidad de Massachussets mostró con técnicas de neuroimagen que los meditadores tienen menos actividad en la red por defecto. Era la primera imagen cerebral del silencio neuronal, de la quietud mental. Hoy es uno de los resultados más consolidados. Y es la base de por qué la meditación conlleva una mejoría de bienestar. «El silencio no se puede callar», dice el místico sufí Ibn Arabi.