doscientos años tras abandonar la Tierra. De las veinte mujeres durmientes en el arca, once no sobrevivieron al despertar y otras tres presentaron malformaciones genéticas. Las seis restantes no fueron usadas para gestar hijas, sino como material base para una clonación masiva. Las llamamos las Eva Próxima. Usted y yo, Leticia, somos descendientes de ellas…