1936. Siete prisioneros escapan de un campo de concentración. Para los fugitivos, es la última oportunidad de sobrevivir a un cautiverio inhumano, el único destino para los disidentes políticos en la Alemania de Hitler. Para los oficiales nazis, es una afrenta personal. Uno a uno, seis de los siete prisioneros son arrestados y crucificados. La séptima cruz narra magistralmente la persecución implacable del último prófugo.
Durante siete días de acción frenética, el comunista Georg Heisler, –un antihéroe convertido en símbolo de la esperanza— intentará huir y encontrar un resquicio de humanidad en la creciente degradación moral de la sociedad alemana.
Seghers nos ofrece el retrato polifónico de una sociedad entregada a un régimen asfixiante en la que los vecinos se espían, los amigos se cuidan de decir lo que piensan, las juventudes hitlerianas –apenas niños— celebran la humillación de los traidores, los campos de concentración se convierten en la encarnación del dolor, el silencio y la muerte. ¿Quién, en esa siniestra trama de informantes y ciudadanos temerosos, se atreverá a tenderle la mano a un fugitivo?
Publicada por primera vez en 1942, durante el exilio de Anna Seghers en México, La séptima cruz se convirtió rápidamente en un símbolo de la resistencia antifascista y fue la primera obra literaria que construyó una estampa fiel del nazismo, enquistado en todos los niveles sociales e institucionales de la Alemania de la preguerra.
Dedicada a todos “los antifascistas alemanes, vivos o muertos”, ofrecemos a nuestros lectores una nueva traducción de La séptima cruz, un clásico indiscutible.