Siempre dama de honor
Otra invitación de cantos dorados apareció en el buzón de Eve Pemberton pero, en lugar de asistir sola como siempre hacía, la práctica mujer de negocios buscaría una pareja falsa. El multimillonario Bryce Gibson era casi una cita de ensueño. Sólo había un problema: era el hombre que le rompió el corazón a Eve cuando era adolescente.En la pista de baile, Eve y Bryce resultaban una pareja convincente… pero ella corría el peligro de enamorarse otra vez de su primer amor.
Mi adorable jefe
Un matrimonio era lo último que Meg Perry tenía en mente cuando fue contratada como niñera de la inagotable hija de tres años de Logan McKendrick. Se sentía atraída por aquel atractivo padre divorciado, pero ¿qué mujer no lo estaría? El problema era que su nuevo jefe también parecía encontrarla irresistible…¿Qué era lo que tenía aquella chispeante psicóloga infantil que hacía que Logan olvidara sus principios? Él no planeaba volver a casarse en breve… aunque quizá fuera hora de pensar con el corazón y no dejar que aquella fantástica mujer se le escapara.
La princesa y el millonario
Sigiloso y peligroso como un felino, uno de los rasgos característicos de Luc Garnier era su capacidad para lograr lo imposible. La princesa Gabrielle no tenía precio. Aun así, Luc había desafiado las probabilidades en contra y conseguido un contrato matrimonial. Sería una unión sobre el papel primero, y de carne y hueso después… Sin embargo, Gabrielle era la misma en privado que en público: educada, de modales impecables y una garantía para su país. Luc estaba decidido a encontrar la libertina que seguramente había tras su fachada…
Chantaje y placer
El multimillonario Tate Bridges jamás permitiría que nada pusiera en peligro lo que le pertenecía, ya fuera su imperio empresarial o su familia. Estaba dispuesto a todo para proteger a los suyos… incluso a chantajear a la mujer a la que había amado.