Cortafuegos es un largo relato que se lee con facilidad e incluso avidez por la agilidad de desarrollo literario y su fascinante trama, llena de intrigantes situaciones policíacas. No pierde ninguna de los atractivos que pueden encontrarse en las novelas anteriores de la serie de Wallander y quizá se pueda decir que supera alguno de ellos, al basar todo el entramado de los crímenes en situaciones que tienen una singular relevancia en la tan actual dinámica social de la globalización. La acción parte del descubrimiento de un hombre fallecido en dudosas circunstancias ante un cajero automático en Ystad, a la vez que dos chiquitas adolescentes protagonizan el asesinato de un taxista, consumado con especial agresividad. Por otro lado, el inspector Wallander se siente muy proclive a los sentimientos de soledad personal, a la vez que detecta conductas y actitudes desleales en alguno de sus compañeros…