Este libro contiene tres narraciones poco conocidos de Rosario Castellanos. Publicadas entre 1949 y 1961, éstas exploran los temas que no dejaron de preocupar intensamente a la autora a lo largo de su trayectoria: la situación de la mujer en la sociedad y la condición entre explotador y explotado. Uno de los cuentos desarrolla, además, aspectos íntimos de la vida de Castellanos: la felicidad de la infancia que se termina con la muerte de su hermano menor. El relato se vuelve entonces, como gran parte de la obra de la autora, una forma de cerrar las heridas, de recuperar la historia.