«Este trabajo es producto de una etnografía realizada en la región del Medio Atrato chocoano, en el Pacífico colombiano. En esta región, mayoritariamente habitada por colectivos afro e indígenas emberá, existen prácticas de resistencia que se definen como defensa de la vida y el territorio. En las últimas décadas esa resistencia responde a las amenazas impuestas por la guerra y la militarización de los territorios. Para analizar esas prácticas privilegio los conceptos propios que están atados a las luchas cotidianas, en lugar de acudir a marcos conceptuales como los derechos humanos o la justicia transicional. La idea del vivir sabroso hace parte de esos conceptos y articula campos como los de la terapéutica, las relaciones de parentesco, la espiritualidad y el movimiento social. Este trabajo hace un recorrido por los lugares y experiencias donde es modulada la vida sabrosa, identificando como allí se ponen en juego procedimientos que procuran mantener un balance entre temperaturas, fuerzas y distancias.»