Érase una vez en Irlanda… Corren los primeros días de enero de 1903 y el profesor Quills, un hombre sabio y triste, vuelve a su casa de Oxford después de asistir a unas conferencias en Londres; Oliver Saunders, joven y tímido, trabaja en su pequeño cuarto de Balliol College, rodeado de diccionarios y novelas góticas; Lionel Lennox, amante de la buena vida y de las faldas ligeras, está en Egipto, a punto de profanar la tumba de una princesa para llevarse una joya de inestimable valor. Poco tienen en común los tres amigos, excepto el interés por las nuevas ciencias que exploran el mundo del más allá, y muy pronto sus ganas de saber los llevarán a Irlanda, una tierra plagada de leyendas, donde las piedras tienen una historia que contar y el sonido de la lluvia se confunde con el llanto de las mujeres.