Hay personas que cumplen el horrible papel de hacer palidecer el entorno, el pasado y el porvenir, porque su luz deslumbrante queda habitando en nuestras pupilas cegándolas para siempre. Antes de que se agote el día, Antonio Alvar deberá cumplir con los propósitos que se ha impuesto y que cambiarán definitivamente su vida, la de su hijo, la de su esposa, la de su mejor amigo y la de la mujer que lo ama. A medida que envejecía a Alvar le iba resultando más evidente la idea de que la sabiduría del universo escapa del todo a la mente humana y, por tanto, que la empresa de ordenarlo, clasificarlo, penetrarlo, resulta vanidosa, y patético el esfuerzo de traducir en palabras el saber. Una novela contemporánea que dibuja la geografía del corazón humano en una prosa sobresaliente que atrapará al lector de la primera a la última página.