Feminismo interrumpido

las mujeres negras estaban excluidas de la femineidad definida por la supremacía blanca y cómo cualquiera que estuviera por fuera de esos límites aceptados simplemente no existía a los ojos del feminismo hegemónico

Fue la teoría feminista negra de todo el mundo la que me despertó a la violencia y la miseria de este mundo y me proporcionó las soluciones más creativas, completas y transformadoras.

la verdadera liberación significaba extender esta nueva libertad más allá de mí misma.

El feminismo liberal nos dice que eso fue hace mucho tiempo y que los tiempos han cambiado. En general, las cosas son mejores para las mujeres que hace cincuenta años. Como vivimos en una época en la que la “igualdad de género” es un tema candente y las figuras públicas y los políticos declaran con orgullo sus credenciales feministas, ahora es más difícil rastrear el legado de esta represión y examinar las formas en que continúa hasta nuestros días. El Estado ha orquestado una cortina de humo.

Cuando las feministas califican al Estado de “sexista”, se refieren a que las disposiciones del Estado, la asignación de recursos y el modo en que se lleva a cabo la supervisión refuerzan la opresión de género al restringir la libertad de las mujeres y garantizar que las mujeres pobres no tengan medios para vivir una vida plena y digna

El Estado organiza nuestras vidas. Define los parámetros de nuestro modo de vida, desde lo que es legal e ilegal hasta los servicios médicos, sociales y políticos a los que podemos acceder. El Estado refiere a una organización central que se encarga de todo, desde el bienestar social y la ley, hasta la vivienda y la policía. El Estado está en todas partes; su principal portavoz es el gobierno, que establece las leyes que debemos cumplir.

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Las cuestiones de las mujeres queer, aunque urgentes y políticamente relevantes, fueron dejadas de lado porque las activistas carecían del lenguaje y la convicción para entender la relación de lo queer con el trabajo feminista y cuestiones de la violencia estatal.

Como mujeres negras que se sitúan fuera de los límites de la “femineidad” tal y como la construyó la blancura, su intención no era simplemente ser incluidas en la categoría, sino transformar su significado y su potencial, permaneciendo atentas a las
necesidades de las comunidades a las que pertenecían.

La condición de opresión de las mujeres negras es un barómetro de la condición de todas las mujeres

Esta perspectiva global
permitió a la gente detectar las similitudes entre sus luchas y reflexionar sobre cómo todas las vidas están estructuradas por los mismos sistemas de poder. Si bien es importante empezar a nivel local y construir movimientos en nuestras comunidades, el trabajo más radical es el que mira más allá de las fronteras y las naciones, y encuentra formas subversivas de vincular el trabajo de los pueblos oprimidos de todo el mundo,