Christie Malry es un joven humilde que ambiciona estar cerca del dinero del que carece. Por ello acepta empezar a trabajar como empleado bancario, pero el ambiente gris y asfixiante pronto le convencerá de que debe buscar nuevos escenarios en los que perseguir sus objetivos. Hacerse contable, su siguiente movimiento, no le acercará más al éxito, pero sí le hará descubrir la herramienta esencial para alumbrar la Gran Idea que dará sentido a su existencia: la contabilidad por partida doble, que Christie adoptará para hacer, literalmente, balance de daños y beneficios en su relación cada vez más turbulenta con un mundo que percibe injusto y despiadado, y contra el que se declara en guerra abierta. Heredero de la mejor tradición satírica británica y deudor de las innovaciones de Laurence Sterne, B. S. Johnson logra ensamblar perfectamente la narración con su reverso: un cuestionamiento de las instancias narrativas que atraviesa todo el texto a mayor gloria de un humor ingenioso y chispeante que convive con la furia y la amargura más descarnadas. Tan lúdica y liviana como inteligente y provocadora, La contabilidad privada de Christie Malry representa una inmejorable puerta de entrada a la obra de un autor extremadamente singular y objeto de un culto creciente.