El mundo es de los emprendedores. Vivimos en una sociedad y en una economía dominadas por un proceso de destrucción creativa: cada año, grandes empresas asentadas son desbancadas de sus posiciones dominantes por pequeñas empresas recién llegadas cuyo modus operandi deja obsoletas las ventajas competitivas de las grandes. Y, sin embargo, a pesar de la orientación empresarial de la economía y de la admiración de que son objeto los emprendedores exitosos, la mayor parte de las nuevas empresas termina su andadura con el más estrepitoso de los fracasos. Se estima que el 40% de las nuevas empresas que comienzan en Estados Unidos no resiste un año, más de dos tercios desaparece en menos de cinco y solamente un 25% sobrepasa los ocho años de existencia. Resulta evidente que algo separa a los emprendedores de éxito de las masas que cada año fracasan en el intento. Encontrar la tierra fértil es un libro que identifica las diferencias clave entre ambos términos, con el fin de proporcionar al lector, emprendedor potencial o real que desea establecer su propia empresa, las herramientas necesarias para identificar un concepto empresarial que le permita explotar una oportunidad única.