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Hebe Uhart

Del cielo a casa

  • Ivana Melgozahas quoted3 days ago
    A pesar de ser mujeres grandes y, se supone, cultas, a duras penas podíamos reprimir una risita nerviosa ante lo desconocido, como si cualquier lenguaje se entendiera espontáneamente y lo que no se entiende se soporta y después seguro que vendrá otra cosa, mariposa. Ahí estábamos, en la Casa de las Culturas del Mundo, formando parte de las especies que pueblan la Tierra.
  • Ivana Melgozahas quoted3 days ago
    Yo tenía mis argumentos para rebatir eso, pero siempre se me ocurrían después.
  • Ivana Melgozahas quoted3 days ago
    Él se manifestaba radical y enjuiciaba con fuerza al peronismo; y a mí siempre me pasó que cuando alguien es muy radical, me dan ganas de defender al peronismo y viceversa. De todos modos, si hubiéramos estado en tierra firme, digamos, y no en un aeropuerto de transborde, o si yo hubiera tenido un vínculo habitual con esa persona, nunca hubiera exacerbado las posiciones.
  • Ivana Melgozahas quoted3 days ago
    Pero se ve que los alemanes miraban todo desde una lejanía, desde la casa de las kulturas del mundo. Traté de familiarizarme con la “K”; había muchos negocios que la usaban acá: Tabak’os, Tuk’os. Una vez que me familiaricé con la “K”, me tranquilicé. Tendría que pensar en mi ropa: me faltaban Korpiños, Kamperat, Zapatillerdumker. ¿Qué era el “Sturm und Drang”? Solía saberlo, voy a preguntar allá; y tendría que estudiar un poquito de alemán, como para decir “café”, “vino”, “fíjese qué cosa”. También aprender un poco de pronunciación, porque no sé por qué extraña obstinación o locura, pronuncio las lenguas a mi manera, como a mí mejor me suenan; me encanta pronunciar a mi manera, como me gusta y no como debe ser. Ahí percibo una falla grave: no hablar un idioma como lo hablan todos implica no adaptarse a las reglas, a los usos, al sentido común. Peor todavía: es no querer sumergirse en la corriente de las generaciones que por años y años han hablado una lengua, patrimonio de todos; de manera caprichosa, me invento una pronunciación para inventarme a mí misma.
  • Ivana Melgozahas quoted6 days ago
    Unos chicos, lejos del café, estaban tirando cuetes en el parque; el ruido llegaba amortiguado y el gato estaba quieto en su caja, como en una casita. El hombre pasaba la mano por la caja y pensaba: “Quién sabe si va a vivir, no, no fue buena la atención hoy... si estaba el alto de ayer... ¿Y si no vive? ¿Y si no vive? Entonces, donaría los órganos a la medicina. Ellos estudian”. Se distrajo pensando en la ciencia: ¡Qué cosa grande, con esos avances que no se pensaban hace 50 años! ¡Y cómo estudian ellos y conocen esos cuerpitos tan chiquitos! Pero de pronto pensó en Chiquito muerto y se dijo: “No, todo entero no; algunos órganos”.

    –Mozo, otra copa de sidra y aceitunas.

    No iba a tomar más de dos copas. A la segunda, pensó que iba a enterrar lo que quedara de Chiquito en el fondo de su casa, con una maderita chata, con el nombre inscripto. A lo mejor vive, a lo mejor no. Se le acabó el entusiasmo por la ciencia, porque pensó: “Ellos mueren sin conocer las palabras. Mueren como si no pasara nada”. Él leía siempre la sección de la página trasera del diario, donde había frases de hombres ilustres, y al morir dejaban algún consejo, algo que querían que se supiera, algo. Pero acá... no, no se podía admitir.
  • Laura A. Moreno V.has quoted2 months ago
    a mí siempre me pasó que cuando alguien es muy radical, me dan ganas de defender al peronismo y viceversa.
  • GiseSThas quoted3 months ago
    La cercanía del parque verde producía una ráfaga de esperanza.
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