La intensa travesía de Anselmo al recorrer la densa selva para asesinar al chaman y cobrar la recompensa por su cabeza. El terror de Barbosa al sentir, desde la lejanía, el calor y presencia del inexplicable tamaño de aquellas enormes llamas tan confusas y misteriosas. El agradecimiento de Alicia a la Santa Niña por haber cumplido a su familia el milagro de salvar la vida de su pequeña hermana, que más tarde se convertiría en asco y arrepentimiento. La desesperanza de Víctor al no poder compartir su vida con alguna mujer sin matarla con un solo beso. La confusión de Pamela al tratar de comprender el amplio rango de emociones humanas y la naturaleza de sus retorcidas acciones.
El misticismo mexicano es un compendio de una amplia gama de leyendas, y el concepto de poderes mágicos, brujería y el milagro de los santos, hacen presencia de forma casi cotidiana.
Julián Mitre da uso de estos elementos para sumergirnos en el suspenso de este cuentario que, desde diferentes historias, nos transporta a través de una narrativa repleta de ficción cuyo borde se vuelve casi invisible ante la realidad mágica del mexicano.