La capacidad de valorar la extensa producción cinematógrafica requiere criterios para identificar aquellas películas de mayor calidad. Resulta de gran ayuda conocer pautas para analizar la puesta en escena, así como la exposición de los recursos técnicos y artísticos. A través de una selección de películas, este libro trasmite por qué algunas, tanto de directores clásicos como actuales, se han convertido en obras maestras que muestran el cine como un auténtico arte, el arte de la mirada, del espacio. Así, tras leer este libro, se apreciará cómo algunas películas —las buenas, como Sed de mal de Orson Welles o Million Dollar Baby de Clint Eastwood—logran revelar la visión genuina y personal del mundo que tiene su director.