En Viajes por Europa, África y América 1845–1848, Domingo Faustino Sarmiento aprovecha un largo viaje para reflexionar sobre los lugares que visita. Parece buscar modelos de referencia o de rechazo útiles a su actividad política en el continente americano.
En el año 1845, Domingo Faustino Sarmiento acababa de publicar como libro su folletín Civilización y Barbarie. Vida de Juan Facundo Quiroga. Ese mismo año se embarcaría en un largo viaje por Europa, Argelia y Estados Unidos, que duraría casi dos años.
A su regreso, reunió sus impresiones de viaje en un conjunto de cartas dirigidas a distintos amigos. Así las publicó con el título de Viajes por Europa, África y América.
El libro de Viajes de Sarmiento se inicia con un prólogo donde el autor intenta explicar sus razones para publicar dichas cartas:
«Ofrezco a mis amigos, en las siguientes páginas, una miscelánea de observaciones, reminiscencias, impresiones e incidentes de viaje, que piden toda la indulgencia del corazón, para tener a raya la merecida crítica que sobre su importancia no dejará de hacer el juicio desprevenido. Saben ellos que a fines de 1845 partí de Chile, con el objeto de ver por mis propios ojos, y de palpar, por decirlo así, el estado de la enseñanza primaria, en las naciones.»