Ánagor, junto a su lobo, descansa sobre una piedra en mitad de la ascensión de una montaña desde la que visualiza su hogar Sakkia: la ciudad dorada.
Los recuerdos de su vida dan inicio a una novela de aventuras y poder que entremezcla la vida en el palacio imperial y la patente desigualdad social en la población bajo el mando del emperador Kaor.
En la familia de cuatro hermanos, la celebración por los años de la coronación del emperador precipitan los acontecimientos que empujan la trama hacia el duelo entre Ánagor y el primogénito del emperador, Mánigor.
Ánagor, desterrado, se convierte en el líder de los pueblos libres y se embarca en la aventura de descubrir los oscuros propósitos de su padre.