Del heredero de Maekar. Se llama Daeron, como el rey. Le dicen Daeron el Borracho, pero nunca en presencia de su padre. También lo acompañaba el benjamín. Salieron juntos de Refugio Estival, pero no han llegado a Vado Ceniza —Raymun apuró la copa y la dejó a un lado—. ¡Pobre Maekar!
—¿Pobre? —dijo Dunk, sorprendido—. ¿Pobre el hijo del rey?
—Hijo, sí, pero sólo el cuarto —puntualizó Raymun—. Menos valiente que el príncipe Baelor, menos listo que el príncipe Aerys y menos cortés que el príncipe Rhaegel. Ahora, para colmo, debe aguantar que sus hijos queden eclipsados por los de su hermano. Daeron es un borracho, Aerion un cruel y un vanidoso, el tercero prometía tan poco que lo entregaron a la Ciudadela para que lo hicieran maestre, y el menor…