Saliendo de misa te topas con Chuck Palahniuk y terminan de copas en un Wings Army ligando. Todo en Guadalajara
La prosa y la construcción de la psique de Gabriel me parecen interesantes, pero sí lo desprecié bastante y ahí justo está el mérito de Antonio Ortuño.
Irónica, irreverente y tan despiadada como la vida laboral.
Oigan estoy muy enojada con este libro, ok