Para mí, sin embargo, escuchar música de acuerdo con las premisas del enfoque formalista sería una experiencia incompleta. La música es una forma de expresión y, como toda forma de expresión, adquiere significado en la interacción entre el emisor y el receptor del mensaje. El significado de una pieza musical surge de la relación entre compositor, ejecutor y oyente. En el complejo diálogo entre expresión, interpretación y significado, no hay nada de malo en que el oyente conozca la intención del compositor. De hecho, un exceso de puritanismo formalista, según el cual habría que dejar de lado todos los datos biográficos y