La buena tierra narra la historia de tres generaciones de una familia de campesinos en la China precomunista. El magistral retrato del orden agrario tradicional y de las rígidas estructuras sociales de la China imperial convive con una pintura hermosa, y a la vez profunda, del alma oriental, del estoicismo de los campesinos frente a la miseria y el hambre y de su vínculo primordial con la tierra, «aquella tierra de la que sacaban su sustento, de la que estaba construido su hogar y sus dioses». Publicada en 1931, La buena tierra cosechó un éxito inmediato y se convirtió rápidamente en una de las obras de referencia que acercaban a Occidente el sentir oriental y describían las agudas tensiones sociales que desembocaron en la proclamación de la República Popular China en 1949. Traducida a veinte idiomas, la novela, primera de la trilogía La familia Wang, mereció distinciones como la medalla William Dean Howells y el Premio Pulitzer (1932). Aunque han transcurrido más de ochenta años desde su primera aparición, el libro ha mantenido su popularidad hasta convertirse en uno de los grandes clásicos de hoy.