Eres o deberías ser el creador de tu propia consciencia, el modelador de tu esencia, el ideólogo de tus propias ideas. Con cada pensamiento vas armando, agregando una nueva pieza al rompecabezas de tu mente. Tu cerebro es un gran depósito de celdas donde guardas todo: recuerdos, imaginación, pensamientos, planes. Tú los acomodas de acuerdo a tus prioridades, cada celda está ordenada específicamente donde tú escogiste, donde tú la colocaste por la razón que sea. Tu mente es tú responsabilidad. Dentro de ti están todas las herramientas para forjar a la persona que quieres ser, lo has visto mil veces, cambias tú y cambias la realidad. No puedes cambiar a nadie más que a ti, y de la única persona que puedes esperar algo es de ti mismo, nadie se comportará como tú esperas que lo haga. Nadie tiene tus mismas prioridades, valores y principios. Nadie sueña tus sueños.