Porque sabemos que toda la creación gime a una, y a una está con dolores de parto hasta ahora; y no sólo ella, sino que también nosotros mismos, que tenemos las primicias del Espíritu, nosotros también gemimos dentro de nosotros mismos, esperando por la adopción, la redención de nuestro cuerpo”.
Jesús, el Gran Maestro, ofreció muchas lecciones para instrucción nuestra. La mayor de ellas y la más espiritual fue “La Revelación de Juan”. En ella, El se mostró a Juan tal y como El es en Su cuerpo redimido. De pie en medio de siete luces, que