es
Books
Elizabeth Gaskell

Las confesiones del señor Harrison

Al terminar su formación en un hospital de Londres, el joven señor Harrison acepta un puesto de ayudante de médico rural en la pequeña ciudad −«yo lo llamaría pueblo»− de Duncombe. «Le parecerá a usted un dato estadístico curioso –le dice su mentor al llegar−, pero cinco de cada seis cabezas de familia de cierto rango en Duncombe son mujeres. Tenemos un gran número de viudas y solteronas ricas. A decir verdad, querido señor, creo que usted y yo somos casi los únicos caballeros.» Y, aunque el recién llegado se fija inmediatamente en Sophy, la hija del párroco, no tardará en convertirse en el centro de una equívoca red de expectativas y decepciones que pondrá a prueba su paciencia… y también su vanidad. Las confesiones del señor Harrison (1851) prefigura claramente Cranford: en su ambiente, en su humor delicado, en su retrato de las pequeñas peripecias que cambian o prolongan el modo de vida de una comunidad apartada y aparentemente tranquila, se percibe ya el interés de Elizabeth Gaskell por trazar, a su manera, una «historia de la vida doméstica en Inglaterra», como había sido intención, aunque nunca llegara a escribirla, del poeta romántico Robert Southey. Del interés de la autora por este plan da fe el artículo «La Inglaterra de la última generación», un divertido compendio de anécdotas de la vida de Knutsford, la pequeña ciudad en que pasó la mayor parte de su infancia y adolescencia, publicado en 1849 y que incluimos como apéndice en este volumen.

Mi querida Sherezade… [La llamo así, señora Gaskell,] porque tengo la seguridad de que sus poderes narrativos son incapaces de agotarse en una sola noche, seguro que du-ran al menos mil y una. Charles Dickens
123 printed pages
Original publication
2018
Publication year
2018
Have you already read it? How did you like it?
👍👎

Impressions

  • b9183049347shared an impression2 years ago
    👍Worth reading

Quotes

  • Eliana Castillohas quoted5 years ago
    gran sir Everard Home6 decía: «Un médico de cabecera puede tener unos modales exquisitos o unos modales pésimos». Ahora bien, en el segundo caso tiene que manifestar talentos y méritos suficientes para asegurarse de que la gente lo reclama, al margen de cómo sean sus modales.
  • Eliana Castillohas quoted5 years ago
    pero cinco de cada seis cabezas de familia de cierto rango en Duncombe son mujeres. Tenemos un gran número de viudas y solteronas ricas.
  • Eliana Castillohas quoted5 years ago
    luego dijo que había perdido a un amigo recientemente, a un hermano médico de una ciudad vecina, que había dejado a su mujer viuda, con una modesta renta, y esta señora estaría encantada de vivir conmigo y hacerse cargo del gobierno de mi casa, para reducir gastos.

On the bookshelves

fb2epub
Drag & drop your files (not more than 5 at once)