La cuenca mediterránea es la cuna de la lechuga. Centenares de variedades hallan en ella un terreno fértil y salvaje. Las primeras representaciones de la lechuga se remontan 4500 años a. C., las cuales aparecen pintadas en las tumbas egipcias. Desde entonces, siguen gustando, hasta el punto de ponerlas en todas las ensaladas.
En esta obra, los autores brindan toda la información necesaria para cultivar lechugas en su jardín o balcón, conservarlas, distinguir las diversas variedades…
Lechugas, escarolas, hoja de roble, rúcula, achicorias, rizadas o romanas, con esta completa guía, ilustrada con numerosos esquemas y fotografías, descubrirá el sencillo placer de las lechugas cosechadas en su jardín, de incomparable sabor.