Pimp, memorias de un chulo

chulo siempre se alegra cuando sus putas se ríen. Sabe que todavía están dormidas.

No puedo vacilar y que se dé cuenta de que todavía estoy en el colegio.

y Henry perdió su lucha interna por su orgullo y su dignidad.

Estaba terminando mi sexto mes. Logré sacar a patadas preocupaciones, voces y montones de ideas de suicidio con el plan del guardián del cráneo.

En todo momento mantendré la guardia sobre mis pensamientos hasta que salga de aquí. Puedo hacerlo. Solo tengo que entrenar a ese guardián. Tiene que ser lo bastante listo como para no permitir problemas ahí dentro. Haré que calle a gritos las voces falsas. Él sabrá que no son reales desde el principio.

El juego seguía llamándose pilla y pierde.

Las láminas de Rorschach son imágenes creadas con manchas de tinta sin ninguna representatividad aparente. Ideadas por Hermann Rorschach, se utilizan desde 1920, no sin controversia, en diagnósticos psicoanalíticos.

En la vida de un chulo ayer no significa nada. Todo es cómo te vaya hoy. La fama de un chulo dura tan poco como un témpano sobre un soplete. Las putas jóvenes y buenas están locas por triscar para un chulo forrado de rasca. A uno en mala situación no le dan ni la hora. El armario de un chulo tiene que ser espectacular. Sus ruedas tienen que ser caras y recién estrenadas. Necesitaba herramientas chillonas para volver a ejercer.

»Nunca olvides que esta familia está unida ante el mundo frío y cruel. Somos fuertes porque nos queremos los unos a los otros. No hay problema que yo no pueda solucionar. No hay nada que yo no pueda responder sobre este juego.

Un chulo es el cabrón que está más solo en toda la Tierra. Tiene que conocer a sus putas. No puede dejar que ellas lo conozcan a él. Tiene que ser Dios todo el tiempo.