Vivimos en un mundo que va de prisa, donde el crimen organizado está a la orden del día; hay asaltos, robos, secuestros, extorsión; es de todo tipo, prostitución y drogas, y donde no tenemos tiempo de hacer nada, solo de trabajar para poder cubrir nuestros pagos. Porque la vida cada vez es más cara. Y es difícil encontrar un buen trabajo, las familias cada día se desintegran y los hijos crecen solos, sin la atención y el cariño de sus padres; creciendo desordenados, maleducados y sin valores, sin tener una carrera o un oficio para poder enfrentarse a la vida. Teniendo una juventud corrompida, irresponsable, que no hace nada productivo en la vida.