En este libro se discuten algunos problemas fundamentales de la sociedad contemporánea que se derivan del desarrollo científico y tecnológico. En el análisis se destacan las aportaciones de la filosofía. La obra explica con claridad que los desafíos de la sociedad del conocimiento, así como los del aprovechamiento de la ciencia y la tecnología para la solución de problemas sociales exigen aproximaciones interdisciplinarias y en muchas ocasiones transdisciplinarias; es decir, enfoques novedosos que abran el camino a planteamientos que no pueden ofrecer por sí solas ninguna de las disciplinas tradicionales.